12 de enero 2020
Después de ayer hoy es un día para buscar una ruta donde haya una orientación sur y a ser posible poco trillada y alejada de las estaciones de esquí. Tenemos información de primera mano y aunque sabemos que hay porteo no conocemos la zona en invierno y eso nos motiva más.
El porteo fue de 50 minutos, justo hasta debajo de la cabaña donde hay que salirse de la pista para meterse en el valle de la derecha. En el descenso ese porteo se redujo a 25 minutos ya que fuimos muy perros aprovechando la nieve quitando y poniendo esquís en numerosas ocasiones.
Para mi se convierte en un clásico a repetir, ya que la pala de descenso directa es alucinante, estuvimos esperando en la cima para cogerla bien y fue todo un exito. Una pala con una pendiente moderada, continua, larga, suave, lisa y cremosa hasta abajo, donde accedimos al valle por una pequeña canal más estrecha.
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Mapa |
DONDE DEJAR EL COCHE: Parking de la Sarra. Entrar desde el pueblo de Sallent hacia la Sarra y al cruzar el puente dejar el coche en el parking.
LA RUTA
Empezamos por la pista atajando por los senderos porteando los esquís (zapatillas mucho mejor) hasta justo debajo de la cabaña de arriba. En la subida ya fichamos hasta el tramo que luego bajaríamos esquiando, que aunque este a ronchos merecía la pena,
Ahí dejamos las zapatillas y ponemos esquís para salirnos de la pista hacia la derecha. El valle se ve súper solitario, solo nos cruzamos con el grupo de la meteoqueviene que se fueron en otra dirección, 3 raqueteros bien majos y dos esquiadores que se quedaron a mitad camino, ideal.
Seguimos bordeando el Sanchacollons por su derecha y observando las maravillosas palas de descenso que no conocemos. Una vez en el fondo del valle giramos a la izquierda y superamos palas moderadas y anchas hasta un rellano enorme. Desde allí solo queda acceder al collado de la izquierda y de ahí a la cima por una última pala empinada y donde mejor no caerse. Llegamos a la cima con esquís y allí como no hacia ni gota de aire esperamos un rato a que transformará la pala.
Comenzamos el descenso sin tener ninguno ni idea exactamente por donde era, así que nos tiramos rectos. Alucinante descenso...sin palabras....glorioso. En el final tiramos un poco a la derecha para meternos en una canal más estrecha para evitar los cortados y retomamos nuestros pasos hasta el coche. Estupendo día con nieve estupenda y gente estupenda.
ALGUNAS FOTOS DEL DÍA
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Canal por la que salimos |
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Apuramos al límite de zigzagear por el bosque |