18 de julio
Ayer terminamos la Pedals de Occitania y aun tenemos dos días más por el valle y hay que aprovechar. Hay un centro BTT en la zona con un montón de rutas para elegir pero con los kilómetros que llevamos en el cuerpo tampoco somos muy exigentes.
Optamos por la ruta 21 que yo quería hacer y Loren modifica el descenso por bikepark de enduro en el cual yo pené bastante.
La ruta muy bonita e interesante. Las pegas son que sube por la carretera secundaria que da acceso a la zona de Aguas Tuertas, concretamente al Refugio de Colomers. Esto quiere decir que no paraban de subir coches, y a partir del tramo donde solo suben los taxis lo mismo. Una vez que sales de esa zona ya la cosa se vuelve más tranquila.
A nivel paisajistico espectacular, y el descenso lo hicimos por la pista azul (Eth Sanglier) la cual sinceramente no me pareció fácil, fui con el pie en el suelo gran parte del descenso (mi nivel de desceso es muy bajo). La parte en la que disfrute más de la zona de enduro fue la última recta llena de subes y bajas muy divertidos.
Saldrán unos 28km y 1000m+.
Saldrán unos 28km y 1000m+.
MÁS INFORMACIÓN: Web del centro BTT
GPS: Pinchar aquí
DONDE DEJAR EL COCHE: Salardú. Parking de caravanas.
LA RUTA
Comenzamos desde Salardú cogiendo la carretera que sube a los Baños de Tredos. Después continuamos por la pista por donde suben solamente los taxis o vehículos autorizados que da accedo al Refugio de Colomers. Desde allí nos separamos de la civilización y seguimos por pista en ascenso y sin descanso (así toda la subida) hasta la parte más alta, un excelente mirador. Comenzamos un descenso muy rápido por pista y vistas espectaculares a toda la zona y el imponente Montardo. A mitad de ese descenso hay un cartel que creo que ponía Pruedo que te desvía a la derecha como camino de andar. Hay que seguir esa pista que pronto te deja en un sendero vertiginoso por la caída al lateral pero sencillo. Después de rodear la montaña, pasando por un par de túneles curiosos llegamos a una antigua infraestructura que atravesamos y cogemos un sendero donde para mi empieza el porteo. Este tramo, hasta donde empiezan las rutas de enduro, es bastante técnico en varios puntos, así que fui subiendo y bajando.
Una vez se llega al inicio de la rutas la cosa se vuelve más sencilla y cómoda. En la campa nos desvíamos a la derecha para coger la Sanglier en la que Loren disfruto como un enano y yo pues a ratos encima y a ratos con el pie, me queda mucho por aprender. El último tramo a mi me dejo con muy buen sabor de boca y luego solo queda retroceder la carretera hasta el parking otra vez.
ALGUNAS FOTOS DEL DÍA
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